Almez (gal. lodoeiro)
Celtis australis L.
Familia:Cannabaceae
Árbol caducifolio
Origen: región mediterránea, sur de Europa, sudeste de Asia y norte de África.
Porte y altura: puede alcanzar los 25 m de altura, de tronco recto y copa amplia y redondeada con ramas que se vuelven gruesas y erectas.
Hojas: caducas, simples, alternas, pecioladas, de color verde oscuro mate por el haz y más claras o blanquecinas por el envés, con forma oval-oblonga a ovado-lanceolada, de entre 5 y 15 cm de largo, base asimétrica, margen serrado o dentado y ápice acuminado.
Flores: pequeñas y poco vistosas, aparecen al mismo tiempo que los brotes jóvenes de primavera, largamente pedunculadas (de 2 a 8 cm); las masculinas en grupos de 2 o 3, en la base de las ramas del año anterior y las hermafroditas solitarias, en la axila de las hojas.
Fruto: drupa pequeña, subglobosa, de color verdoso al principio que oscurece hasta casi llegar al negro al madurar. Permanece en el árbol hasta el invierno. Se llaman “celtinas”.
Otros datos: su corteza es lisa y grisácea al principio y se grieta finamente con los años.
Utilidades y curiosidades: su madera compacta y elástica se emplea en tonelería y para fabricar utensilios como horcas y bastones. Sus frutos son comestibles y se usan para elaborar licores artesanales; también son muy útiles para aumentar la presencia de pájaros en los parques, ya que se alimentan de ellos. Su follaje sirve de alimentación para el ganado. Su uso más extendido es como árbol ornamental, como ejemplar aislado, pero, sobre todo, en alineaciones. En los últimos tiempos años se ha usado con frecuencia para sustituir a los olmos. Es una especie longeva.
Necesidades y cultivo: árbol de bajo mantenimiento, tolera bien todo tipo de suelos; también resiste la sequía y la contaminación. Su sistema radicular es profundo. Prefiere exposiciones a pleno sol y soporta bien el viento. La poda no es necesaria; de hecho, no la acepta bien y suelen salirle cavidades.