Decálogo:

• Se priorizarán las necesidades de los sectores más vulnerables: 1º peatón, 2º ciclista, 3º transporte público, 4º vehículo privado
• Se potenciará una buena conservación del patrimonio viario provincial con desbroces y limpieza de cunetas, mejora del firme, señalización, balizamiento e iluminación
• Los proyectos de actuación en tramos de concentración de accidentes serán prioritarios
• Se fomentarán las reducciones de velocidad mediante señalización y medidas de calmado del tráfico
• Las actuaciones de modificación de trazado y ampliación de la plataforma se realizarán sólo en carreteras con una intensidad media diaria superior a 3.000 vehículos/día de no ser viables otras alternativas de menor impacto
• Se dará un tratamiento específico a las áreas de especial interés para poner en valor el patrimonio e integrarlo en cada actuación
• En los proyectos de (re)urbanización se creará un espacio peatonal continuo de seguridad con aceras de rasantes continuas, un ancho mínimo de 2,50 metros y criterios de accesibilidad universal
• Las actuaciones de urbanización de vías provinciales se cofinanciarán al 70 % por la Diputación y al 30 % por cada ayuntamiento, las reurbanizaciones al 60 % y al 40 %, y las sendas peatonales y/o ciclables al 80 % y al 20 %. Estos criterios podrán modificarse si se obtienen fondos europeos o análogos. La puesta a disposición de los terrenos correrá a cargo de los ayuntamientos
• En las (re)urbanizaciones irá aparejada la transferencia a los ayuntamientos de la titularidad de la vía en el tramo correspondiente
• El cuidado y mantenimiento de los servicios urbanos corresponderá a los ayuntamientos. A la Diputación le corresponderá la conservación del firme, la señalización horizontal y vertical y la red de pluviales